El pasado mes de agosto, los bomberos forestales fueron, por desgracia, unos de los principales protagonistas. Como era inevitable, al informar los medios de comunicación sobre los históricos incendios salieron a la palestra las míseras condiciones laborales que, en casi todas las comunidades autónomas, sufre este colectivo de trabajadores fundamentales para la protección de nuestro medio natural. Parte de la población e incluso periodistas y presentadores que no conocían esta realidad laboral se escandalizaban al conocer los salarios, la temporalidad o la infradotación del servicio. Sin embargo, para cuando a principios de agosto surgieron las primeras llamas, un colectivo había dicho «basta» y, tras varios meses de infructuosas negociaciones, incluido un día de huelga ya en abril, se había puesto en huelga desde el 15 de julio: se trata de los bomberos forestales de la Comunidad de Madrid. En Nuevo Rumbo hablamos con ellos de sus condiciones laborales y las razones de su lucha.
Nuevo Rumbo: Para quienes no conozcan vuestra situación laboral, ¿en qué condiciones trabaja un bombero forestal en la Comunidad de Madrid?
Bomberos forestales: Los trabajadores del servicio de prevención y extinción de incendios forestales de Madrid se rigen actualmente por un convenio de 2008 totalmente desfasado, con sueldos de 1.300 euros, sin protección frente a agentes cancerígenos y una temporalidad superior al 40 % de la plantilla.
NR: ¿Cómo afecta ese contexto laboral a vuestra situación personal y familiar?
BBFF: Afecta de lleno: muchos compañeros deben tener segundos trabajos para llegar a fin de mes en una de las comunidades más caras de España y esto en los casos del personal fijo; en el caso de quienes son trabajadores temporales, solo trabajan cuatro meses, con lo que eso conlleva de una doble precariedad, empalmando contratos temporales en invierno, en el mejor de los casos.
NR: En Madrid el servicio está externalizado a la empresa pública Tragsa, ¿cómo os afecta esa situación?
BBFF: Este servicio pertenece a la comunidad de Madrid desde hace 40 años, hasta que el Gobierno del PP privatizó el servicio primero a empresas privadas durante 22 años, y después de protestas y huelgas estas empresas salieron y entró la publica Tragsa, dependiente del Gobierno central. Esto está dejando a la plantilla en una lucha política entre el Gobierno de Ayuso y el Estado donde ambos se tiran la pelota a su tejado, y Tragsa se niega a negociar un convenio propio en Madrid para no abrir la veda y tener que negociar con otros operativos del Estado. Al final, las dinámicas de la empresa privada se repiten en la pública: maximizar resultados a costa del trabajador.
NR: El pasado 15 de julio iniciasteis una huelga que ha durado todo un mes, ¿cuáles son vuestras principales reivindicaciones?
BBFF: Principalmente, el fin de la temporalidad, la negociación de un nuevo convenio colectivo, la aplicación de la ley del bombero forestal y un plan de protección frente a agentes cancerígenos.
NR: El 15 de agosto anunciasteis que suspendíais la huelga, pero que el conflicto no había terminado. ¿A qué se debe esto?
BBFF: Debido a la ola histórica de incendios que está sufriendo España, se decidió dar una tregua de ocho días por la situación de emergencia y de paso dar una oportunidad a la responsabilidad por parte de la Comunidad de Madrid y Tragsa, pero por desgracia apenas hubo movimientos y este 25 de agosto volvimos a la huelga, esta vez de forma indefinida.
NR: ¿Cuál ha sido la respuesta de la plantilla durante la huelga? ¿Habéis sufrido algún tipo de consecuencias por parte de Tragsa y la Comunidad de Madrid?
BBFF: La respuesta la catalogamos de muy positiva desde el principio. Pese a contar con un número alto de trabajadores temporales, los seguimientos han sido muy buenos, y también la determinación a la hora de realizar acciones de presión. La empresa aumentó el control en el día día de los compañeros e interpuso algunas sanciones por motivos falsos para intentar no mostrar la realidad de los bomberos forestales de la comunidad.
NR: Durante las últimas semanas se ha evidenciado que vuestra labor es esencial, ¿se traduce esto en apoyo a vuestras reivindicaciones? ¿Habéis percibido apoyo social durante la huelga?
BBFF: La sociedad y el pueblo trabajador están siendo un balón de oxígeno por su apoyo total a nuestro trabajo, mucha gente desconocía por completo las condiciones del sector en España y ahora están saliendo a la luz.
NR: Sabemos que pese a las diferencias laborales de una comunidad autónoma a otra sois un colectivo muy unido, ¿qué podéis contarnos de otros operativos de España? ¿Se dan condiciones de precariedad similares?
BBFF: En general somos un sector precario, pero sí es cierto que hay comunidades mucho peores que otras. Sin duda, en el vagón de cola encontramos a Madrid y, detrás, la comunidad de Castilla y León, donde se roza la esclavitud en algunas cuadrillas. En general, los salarios bajos, la temporalidad y la escasa formación son problemas muy extendidos en los dispositivos de extinción.
NR: Muchas gracias por vuestra labor y por atender la entrevista, y esperamos que logréis una importante victoria. Si queréis, podéis añadir algo más.
BBFF: Dar las gracias al PCTE por su apoyo en nuestra lucha desde hace años. Os invitamos a seguirnos en redes (X e Instagram) en la cuenta bbffMadrid para conocer nuestro trabajo y nuestra lucha. Saludos revolucionarios.